domingo, 25 de octubre de 2009

Manual de Instrucciones para una vida.

¿Cuantas veces en la vida hemos echado en falta tener un manual de instrucciones que nos indique cómo actuar o cómo reaccionar? Por desgracia, los niños venimos a este mundo con un pan bajo el brazo cuando sería mucho más práctico que viniéramos con un manual, con una guía que nos ayudara a encaminar nuestros pasos hacia lo que nos haga felices.

Hay gente que dice que eso no tiene gracia. Que cada uno tiene que tomar sus decisiones. Que es necesario equivocarse y pasarlo mal para hacernos fuertes y estar preparados para afrontar problemas futuros. De hecho, ya el pensador griego Séneca dijo en la antigüedad: "Hace falta toda una vida para aprender a vivir".

Para aquellos que siempre habéis deseado tener unas pautas o un manual de instrucciones al que acudir en casos difíciles, aquí os doy 30 pautas que debéis tener en cuenta para ser capaces de alcanzar una vida plena, feliz y vacía de preocupaciones:

1) La vida no es justa, pero aún así es buena. Aunque la vida no esté envuelta con un lazo, sigue siendo un regalo.

2) Cuando tengas una duda. Cuando estés en una encrucijada, sólo preocúpate del pequeño paso siguiente.

3) El odio es un lastre. La vida es demasiado corta para estar siempre "cabreado". No pierdas el tiempo odiando a alguien.

4) El trabajo no acudirá en tu ayuda cuando estés enfermo. Tus amigos y tu familia si. Mantén el contacto.

5) Liquida tus tarjetas de crédito cada mes.

6) No tienes que ganar cada discusión. Debes estar de acuerdo en no estar de acuerdo.

7) Llora con alguien. Alivia más que llorar solo. Está bien permitir que tus hijos te vean llorar.

8) No te preocupes por "cabrearte" con Dios. Él, lo puede soportar.

9) Cuando se trata de chocolate, la resistencia es inútil.

10) Haz las paces con tu pasado sino quieres que te arruine el presente.

11) No compares tu vida con la de otros. No sabes lo que hay en su travesía...

12) Si una relación tiene que ser secreta, no debes estar en ella.

13) Todo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Pero tengas miedo a los cambios. Si algo no te mata, te hace más fuerte.

14) Respira profundamente. Calma la mente.

15) Elimina de tu vida todo lo que no sea útil, gozoso o hermoso.

16) Nunca es demasiado tarde para tener una infancia feliz. Pero eso sólo depende de ti. De nadie más.

17) Cuando se trate de perseguir aquello que más amas en la vida, no aceptes un NO por respuesta.

18) No reserves nada para una ocasión especial... Hoy es especial.

19) Sé excentrico ahora. No esperes a ser viejo para hacer locuras.

20) Perdónale todo a todos.

21) El tiempo lo cura casi todo. Dale tiempo al tiempo.

22) Tras un "desastre" en tu vida, pregúntate: "En cinco años, ¿ésto realmente importará?".

23) No te tomes tan en serio... Nadie lo hace.

24) Nadie más que tú está a cargo de tu felicidad.

25) Sal todos los días. Miles de sorpresas te están esperando en todas partes.

26) Tus hijos sólo tienen una niñez... No la estropees.

27) La envidia es una pérdida de tiempo. Tú ya tienes todo lo que necesitas.

28) El órgano sexual más importante es el cerebro.

29) Lo que las otras personas piensen de ti, no te incumbe.

30) Lo mejor aún está por llegar...

Si creéis que falta algún punto para completar el manual, no dudéis en comentarlo...

Muchas gracias y... Hasta luego.


También os puede interesar:
- Somos lo que vemos.
- Los Nuevos Ladrones.
- Carta de Gandhi a Hitler.
- El cráneo de Hitler.
- Lo que el dinero No puede comprar.

2 comentarios:

Maribel dijo...

Creo que esto lo dice todo:

Gabriel García Márquez, se ha
retirado de la vida pública por razones de salud: cáncer linfático. Ahora, parece, que es cada vez más grave. Ha enviado una carta de despedida a sus amigos, y gracias a Internet está siendo difundida.
Les recomiendo su lectura porque es verdaderamente conmovedor este corto texto escrito por uno de los Latinoamericanos más brillantes de los últimos tiempos.

“Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo y me regalara un trozo de vida, aprovecharía ese tiempo lo más que pudiera”.
Posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo.
Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan.

Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz.Andaría cuando los demás se detienen,despertaría cuando los demás duermen.

Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, dejando descubierto, no solamente mi cuerpo, sino mi alma.
A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse!
A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo aprendiese a volar.
A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres... He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada.
He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por primera vez, el dedo de su padre, lo tiene atrapado por siempre.

He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse.
Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero realmente de mucho no habrán de servir, porque cuando me guarden dentro de esa maleta, infelizmente me estaré muriendo.
Siempre di lo que sientes y haz lo que piensas.
Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.

Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo diría “te quiero” y no asumiría, tontamente, que ya lo sabes.
Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero, que nunca te olvidaré.
El mañana no le está asegurado a nadie, joven o viejo. Hoy puede ser la última vez que veas a los que amas. Por eso no esperes más, hazlo hoy, ya que si el mañana nunca llega, seguramente lamentarás el día que no tomaste tiempo para una sonrisa, un abrazo, un beso y que estuviste muy ocupado para concederles un último deseo.
Mantén a los que amas cerca de ti, diles al oído lo mucho que los necesitas, quiérelos y trátalos bien, toma tiempo para decirles “lo siento”, “perdóname”, “por favor”, “gracias” y todas las palabras de amor que conoces.

Nadie te recordará por tus pensamientos secretos. Pide al Señor la fuerza y sabiduría para expresarlos. Demuestra a tus amigos y seres queridos cuanto te importan.”
Si no lo haces hoy, mañana será igual que ayer.
Y si no lo haces nunca tampoco importa.
El momento es este.
Saludos con mucho cariño !!!!

Gabriel Garcia Marquez

Jordi Mestres dijo...

Muchas gracias Maribel...

Me has hecho un magnífico regalo...

Besos.

Publicar un comentario